El mundo ecuestre ha visto ventas impresionantes a lo largo de los años, pero ninguna tan sorprendente como la del caballo Fusaichi Pegasus, que ostenta el título del caballo más caro del mundo. Este puro sangre alcanzó un valor de 70 millones de dólares en el año 2000, tras una carrera exitosa que incluyó la victoria en el Kentucky Derby de 2000.
El elevado precio de Fusaichi Pegasus no es solo por sus victorias en las pistas de carreras, sino también por su valor genético. Al ser un caballo puro sangre de renombrada descendencia, su capacidad para transmitir sus genes a futuras generaciones de corredores lo convirtió en una inversión deseada por criadores de élite en todo el mundo.
Además de su éxito en el Kentucky Derby, Fusaichi Pegasus tenía una gran reputación por su impecable línea de sangre, proveniente de campeones del mundo de las carreras de caballos. Esto, junto con su atractivo físico y su gran potencial en la cría, ayudó a inflar su valor hasta la asombrosa cifra de 70 millones de dólares.
A continuación, un ranking con algunos de los caballos más caros jamás vendidos:
Como ya hemos mencionado, este legendario caballo de carreras japonés sigue siendo el más caro de todos los tiempos.
Este caballo inglés, adquirido en 1983, también fue valorado por su potencial en la cría y por su impecable linaje, además de haber tenido un buen desempeño en las carreras.
Totilas es un caballo de doma clásica que alcanzó la fama por su elegancia y habilidades excepcionales. Su venta en 2011 marcó un récord en el mundo de la doma.
Con uno de los mayores precios pagados por un caballo en una subasta, The Green Monkey no tuvo una carrera destacada, pero su genética y potencial lo llevaron a ser vendido por esta elevada cifra.
Este caballo de salto es famoso por haber sido vendido en 2013. Su excelente rendimiento en competencias de salto ecuestre lo convirtió en una de las ventas más caras en esta disciplina.